EL MUNDO TIENDE A VOLVER A SUS ORÍGENES BUCALES o en su defecto ORALES.
me pidieron ser mas especifico con mi recuerdo,pero no quiero abandonar la atmósfera sureña que me llevo a escribir el primer recuerdo, si que pretendo ser mas especifico en ello
el proceso de cocinar tiene una serie de pasos que tienen una secuencia de pasos determinados que se debe llevar a cabo, no se puede cocinar un huevo sin antes romperlo, o sin hechar antes el aceite al sartén, tal vez esa sea la parte escencial para entender el como empezar, proyectar y terminar un proyecto, en el pasado intento, falle en la comprension del ejercicio, le había dado una serie de complicaciones que a fin de cuentas no fue tan malo como esperaba.
me pidieron ser mas especifico con mi recuerdo,pero no quiero abandonar la atmósfera sureña que me llevo a escribir el primer recuerdo, si que pretendo ser mas especifico en ello
el proceso de cocinar tiene una serie de pasos que tienen una secuencia de pasos determinados que se debe llevar a cabo, no se puede cocinar un huevo sin antes romperlo, o sin hechar antes el aceite al sartén, tal vez esa sea la parte escencial para entender el como empezar, proyectar y terminar un proyecto, en el pasado intento, falle en la comprension del ejercicio, le había dado una serie de complicaciones que a fin de cuentas no fue tan malo como esperaba.
Ahora el objetivo es simplificar, y digerir (concretizar) lo que antes había pensado.
un comentario me llego mucho y me clarifico la mente:
"la cocina autóctona tiene mucho de lo casero, lo proveniente de la tierra, lo hecho con cariño, lo huachaca, no como lo de ahora, que parece ser todo instantáneo y embazado".
Vuelvo a Chiloe, y a sus papas, al re-encuentro con una persona que no veía hace tiempo:
Al momento de cocinar es inevitable volver a sentir olores que van transformando lentamente un lugar, es como una suerte de manto que se va impregnando lentamente en la superficie de la sala, sus mesas, sillas, la pizarra, el techo, y así sucesivamente... y cerrando los ojos es fácil engañarlos y crear un ambiente totalmente contrario a lo real y aun así continuando con los ojos cerrados la vista es capaz de reconocer rápidamente las formas, pero en este proceso de reconocer anteriormente viene condicionado por el resto de los sentidos por lo que el sentido de la vista termina siendo subordinado al resto de los sentidos, así por ejemplo al poder sentir el olor humedad y las papas me recordaron la cocina campestre y sureña, y no fue sino que el gusto, lo que me completo la visión de este recuerdo, habitandolo por mas personas; sentir el sutil tacto de entre lo sensible de mi boca y lo consistente del puré llevaron a completar exitosamente la cuarta dimensión del recuerdo: el tiempo.
El olor nos insinúa cosas pero es el tacto y el gusto lo que nos lleva a apropiarnos de estas insinuaciones.
Pure de papas Chilotas
1kg papas
6 tazas de Leche
1 taza de Agua
1/4 cuchara de Sal
1/4 cucharita de Mantequilla
Pure de papas Chilotas
Preparacion
se pelan y cortan las papas en cuadritos, una vez dentro de la olla se dejan a baño maria hasta que se puedan deshacer, luego se le hecha la leche y la sal moliendo y revolviendo el pure lentamente por 20 min.
Todo esto se traducía en una elegante presentación que termino siendo elocuente a lo que pensaba y consecuente a lo que proponía, pude llegar a elevar algo tan común, misero y huachaca como lo es una papa
a un estadio de elegancia absoluta, solo mediante la comprension del gusto, el tacto y el olfato, acompañado con una pisca de recuerdos propios.
Pure de papas Chilotas
1kg papas
6 tazas de Leche
1 taza de Agua
1/4 cuchara de Sal
1/4 cucharita de Mantequilla
Pure de papas Chilotas
Preparacion
se pelan y cortan las papas en cuadritos, una vez dentro de la olla se dejan a baño maria hasta que se puedan deshacer, luego se le hecha la leche y la sal moliendo y revolviendo el pure lentamente por 20 min.
Todo esto se traducía en una elegante presentación que termino siendo elocuente a lo que pensaba y consecuente a lo que proponía, pude llegar a elevar algo tan común, misero y huachaca como lo es una papa
a un estadio de elegancia absoluta, solo mediante la comprension del gusto, el tacto y el olfato, acompañado con una pisca de recuerdos propios.